Las plantas de los ventisqueros están restringidas a lugares con cobertura de nieve garantizada y duradera. Representan al grupo más sensible en lo que respecta a la tolerancia a las heladas. La nieve protege estas plantas de temperaturas críticamente bajas (Soldanella pusilla, Alpes centrales 2500 m). Lo que aparenta ser un lugar con estrés extremo de hecho representa uno de los lugares alpinos mejor protegidos de las críticas bajas temperaturas. La nieve que se acumula en ciertos "hábitats de acumulación de nieve" se derrite muy tarde en la primavera. Los especialistas de los ventisqueros tales como especies de Soldanella han preformado flores (formadas en la estación previa) que empiezan a expandirse, una vez que está "caliente", el agua de deshiele a cero grados se filtra dentro de sus rosetas y la radiación solar penetra la cada vez más fina capa de nieve. Las frágiles flores no se abren paso a través de la nieve y el hielo, se "funden". Sus flores atraen radiación de onda larga que hace que la nieve se derrita más rápido a su alrededor. Esto ayuda a estas plantas a hacer el uso eficiente de la corta estación en dichos hábitats de ventisqueros.